Cuatro siglos de amor y fe hacia el Niño Jesús Hijos de Escuque

Hijos de Escuque, acompañados de feligreses nacionales y representantes del clero se unieron ayer para venerar la Santa Imagen del Niño Jesús, día cuando se conmemoraron cuatro siglos de su llegada al tranquilo poblado.

El repique de campañas a las 6 am, de este jueves anunció la magna celebración religiosa, registrándose mayor concurrencia en la misa solemne presidida por Monseñor Vicente Ramón Hernández Peña, Obispo de Trujillo, concelebrada por Monseñor Trino Valera, Obispo de La Guaira, Monseñor Joaquín Morón Hidalgo, Obispo de Acarigua e ilustres del prelado católico.

Devoción

El calor e incomodidad por la multitud no fue impedimento para adorar al hijo de Dios, quien representa sencillamente amor y fe por un mundo lleno de alegría, prosperidad, hermandad y armonía.

Para Hernández Peña el comportamiento de los devotos merece un oportuno reconocimiento, "el Dulce Nombre de Jesús es un signo de unión enmarcado en la fe, Dios nos emplaza amar a todos los niños, ellos son la fiel imagen de su hijo, por eso hay que quererlos y educarlos para convertirlos en hombres de buena voluntad. Debemos pensar en la fidelidad que Dios ha tenido con nosotros para retribuirle de la misma manera, siéndoles fieles en la vida familiar y profesional. En tiempos difíciles no podemos renunciar a ser mejores, no podemos quedarnos callados, hay que hacerle frente a las cosas para concebir un pueblo alegre y no triste".

Renovación

A juicio del Párroco de Escuque, Douglas Rodríguez, durante el cuadragésimo aniversario el mejor regalo que se le puede hacer al Niño Jesús es que sus seguidores renueven su fe, y tengan la disponibilidad de abrir su mente y corazón al Todopoderoso, que es quien ha de reinar en nosotros.

Igualmente, José Antonio Puche, Alcalde indicó que con satisfacción y esperanzas el municipio rinde tributo a su patrono, "hay que agradecerle a Dios la oportunidad de formar parte de la historia, en especial cuando celebramos los 400 años de la llegada de la Santa Imagen del Niño Jesús. Escuque reafirma sus creencias católicas y se proyecta a mantenerla férreamente", dijo.

Reino de amor y justicia

Por su parte Monseñor Valera, señaló que hay que unificar criterios para que Escuque tenga un relevante puesto en cuanto a sus creencias religiosas a nivel nacional se refiere, pues su arraigada devoción se asemeja a las demostradas por la Divina Pastora, La Chinita o Virgen del Valle.

"Unidos y en base a la Misión Continental no podemos quedarnos sólo en la devoción, tenemos que llegar a la acción para transformarla en realidad, haciendo de ella lo que Dios quiere, es decir, su reino de amor y justicia. En la actualidad Dios pide la santificación del clero para derramar abundantes bendiciones. El mejor regalo a recibir el patrono escuqueño es conquistar la paz, alejándonos de la guerra, así viviremos en fraternidad, pudiendo compartir entre amigos, haciendo surgir la oración y agradeciendo al Señor", expresó.

Suplantación

En 1610 con la radicación en la jurisdicción de la familia Guánchez Cerrada los aborígenes conocen la Imagen del hijo de Dios, produciéndose la sustitución de un elemento, religión, creencia o convicción por otra. Para ese momento el proceso de colonización estaba muy adelantado, habían congregaciones religiosas encargadas del adoctrinamiento y catequesis, así al proyectar la Imagen tanto a los aborígenes e hispanos se arraiga en lo más profundo del alma y corazón de esa comunidad. El pronunciamiento fue hecho por Juan Carlos Barreto, Cronista, quien recordó que el Niño Jesús es un elemento de confluencia en torno al cual el colectivo se junta sin distingos, además es proyectado en el escudo, bandera e inclusive himno municipal.

Decoración

La señorita Consuelo Barrios Viloria, presidió el comité de ornato, el templo lució regio, con cientos de lirios y aves de paraíso. En los laterales internos fueron colocadas alusiones a la veneración a la Diosa Ikake por los aborígenes y las manos españolas que portaron la Imagen del Niño. Igualmente, en el área central del altar fue colocada una esfera dorada en representación de la Deidad y adelante el Niño, representando la sustitución de una creencia por otra.

El venerado portó su corona de oro con piedras preciosas y un nuevo atuendo, confeccionado por Marián Rodríguez. Adrián "Pancho" Rives le obsequió al guía espiritual una rosa de brillantes por favor concedido.

Fieles devotos

Yaritza Segovia: Durante 18 años le he pagado promesa al Niño Jesús de Escuque. Siempre le he pedido por mi familia y que mis hermanas conciban sus hijos sin inconvenientes. Él es sinónimo de amor y esperanza

María de Linares: El Niño Jesús me ha iluminado el camino para conformar mi familia y trabajar, se lo agradezco profundamente. Tengo casi dos décadas acudiendo los 14 de enero a los actos programados

Carmen Alicia Escalona: Siento férrea devoción y amor por el Dulce Nombre de Jesús. Los 14 de enero asisto a la misa solemne y procesión. Le pido bienestar para todas las familias, prosperidad y unión para el país

Juana Albúrguez: Tanto a mi esposo como a mí el Niño Jesús no ha bendecido en momentos de enfermedades. Tengo tres años acudiendo a la celebración central en su honor. Para Venezuela le pido paz y tranquilidad

Martha Guerrero: Venerar al Niño Jesús es una tradición familiar, todas las generaciones lo hemos hecho, él representa el verdadero amor que tanto anhelamos. En mis oraciones le ruego por que prevalezca el entendimiento entre gobernantes

Olida de García: Mi fe por el Niño es incalculable, siempre le oro por los necesitados, enfermos e infancia desprotegida. Tengo 40 años acudiendo a la Iglesia Dulce Nombre de Jesús para encontrar la gracia divina

José Araujo: Desde muy chico veneró al Patrono de Escuque, ser monaguillo me acercó mucho más a él, lo considero un de mis mejores amigos. Ojalá en su aniversario nos regale paz y amor para todos

Ángel Reyes: La feligresía le eleva plegarias al Niño Jesús para vivir en paz, armonía, reconciliación y humildad. Esta Santa Imagen es muy milagrosa y venerada a nivel nacional, a mí me ha concedido varios favores