Del Potro se corona campeón del US Open tras vencer a Federer

La ´Torre de Tandil´ venció al número uno del mundo por 3 sets a 2 y se coronó campeón del Abierto de Estados Unidos en una final que duró poco más de cuatro horas. El joven tenista argentino Juan Martín del Potro entró hoy en la historia del tenis mundial al derrotar por 3 sets a 2 al suizo Roger Federer, número uno del mundo, quien se vio superado en la infartante final masculina del US Open 2009.

En la primera manga, el suizo se impuso por un contundente 6-3 en base a un juego solvente y preciso que poco hizo imaginar lo peleado que sería el match.

En el segundo set, Del Potro sacó la garra argentina y derrotó al suizo por 7-6 en un peleado juego que puso en vilo al público que abarrotó las graderías del estadio Arthur Ashe de Flushing Meadows, en Nueva York.

En la tercera manga, Federer despertó su verdadero poderío y gastó a Del Potro con saques esquinados. El helvético finalmente venció por 6-4 y así se llegó al cuarto set.

Mientras tanto, en Argentina la expectativa era total, sobre todo en Tandil, ciudad natal de Del Potro, número seis del mundo.

Las energías positivas en favor del gaucho recorrieron las distancias y llegaron hasta el estadio, pues el rival de Federer despertó de su letargo y ganó el cuarto set por un ajustado 7-6.

Con el quinto set encima, "Delpo" se lanzó sobre de Federer y le faltó el respeto de la forma más deportiva posible. Le jugó con valentía, con fuerza y pundonor. El argentino se metió al bolsillo a los asistentes gracias a sus arriesgadas jugadas y ganó el set por 6-2. De ese modo, el gaucho se coronó campeón del US Open en una tarde que jamás olvidará.

Del Potro hizo gala de empuje, coraje y ganas. Dejó en claro la inefable muestra de evolución de un deportista que hace rato dejó de ser promesa para convertirse en toda una realidad. Los argentinos deben sentirse orgullosos al tener al popular "Palito" como uno de sus máximos representantes en el mundo de las raquetas.

Juan Martín, a sus casi 21 años de edad, le amargó el final de la película a Federer, quien hoy, como nunca, habló más de la cuenta con el réferi del partido en clara muestra de nerviosismo por el juego agresivo del sudamericano.

El "Expreso" se chocó con la "Torre de Tandil", que obtuvo a fin de cuentas el séptimo título de su carrera en singles, sin impotarle las 61 coronas que posee quien fue su rival de hoy, nada más y nada menos que el número uno del mundo.