Con la religión católica no se juega en Italia. Tampoco con la asignatura que la enseña en las escuelas. Las reacciones a la sentencia del Tribunal Administrativo de Roma que dice que la nota de Religión no puede contar para la nota media de acceso a la Universidad han ido echando cada vez más leña al fuego desde que se publicara el fallo el pasado miércoles.La ministra de Educación, Maria Stella Gelmini, se alineó con los obispos y anunció que iba a recurrir el fallo: "Los italianos son libres de elegir o no si cursan la asignatura de religión (...), que es parte de nuestro patrimonio histórico, de nuestros valores y tradiciones. Y, por lo tanto, merece todo el reconocimiento y respeto posibles", dijo.
Lo hizo pocas horas después de la llamada del Vaticano "a los poderes públicos" contra la decisión del tribunal. El presidente de la Comisión Episcopal para la Educación Católica, la Escuela y la Universidad, el obispo Diego Coletti, cuestionó la legitimidad de un Tribunal Administrativo para dirimir en una cuestión de "profundo calado moral".
Los jueces dicen que si la nota de Religión cuenta para entrar en la Universidad se atenta "contra el principio de pluralismo por el que se rige una sociedad democrática" y supone "una forma de discriminación, dado que el Estado italiano no garantiza la igualdad de oportunidades a los estudiantes de confesión no católica". Éste último es el argumento por el que en España la Religión tampoco cuenta para la nota del bachillerato que luego hace media a su vez con la Selectividad. Eso sí, suspender Religión sí cuenta para repetir curso.
Pero, en Italia, la decisión ha encendido a los sectores conservadores. Ayer, fue otro editorial incendiario de l'Avvenire, el periódico de la Conferencia Episcopal italiana, el que echó más leña al fuego. Los defensores de la asignatura han creado una red social en Facebook que ya tiene cientos de adhesiones. El 91,1% de los alumnos italianos estudia Religión católica. El sindicato de profesores de Religión (SNADIR) ha anunciado que también recurrirá el fallo.
Sin embargo, la decisión parece contar con el apoyo de la mayoría de los italianos -el 59% está a favor de sacar la asignatura de la nota final, según el único sondeo realizado hasta el momento, el de Sky Tg 24-. Entre las reacciones a favor, destacan la de Antonio di Pietro, líder de Italia de los Valores, "como católico y con todo el respeto que le tengo a la Iglesia (...) una discriminación confesional no puede tener cabida en la formación escolar".
Lo hizo pocas horas después de la llamada del Vaticano "a los poderes públicos" contra la decisión del tribunal. El presidente de la Comisión Episcopal para la Educación Católica, la Escuela y la Universidad, el obispo Diego Coletti, cuestionó la legitimidad de un Tribunal Administrativo para dirimir en una cuestión de "profundo calado moral".
Los jueces dicen que si la nota de Religión cuenta para entrar en la Universidad se atenta "contra el principio de pluralismo por el que se rige una sociedad democrática" y supone "una forma de discriminación, dado que el Estado italiano no garantiza la igualdad de oportunidades a los estudiantes de confesión no católica". Éste último es el argumento por el que en España la Religión tampoco cuenta para la nota del bachillerato que luego hace media a su vez con la Selectividad. Eso sí, suspender Religión sí cuenta para repetir curso.
Pero, en Italia, la decisión ha encendido a los sectores conservadores. Ayer, fue otro editorial incendiario de l'Avvenire, el periódico de la Conferencia Episcopal italiana, el que echó más leña al fuego. Los defensores de la asignatura han creado una red social en Facebook que ya tiene cientos de adhesiones. El 91,1% de los alumnos italianos estudia Religión católica. El sindicato de profesores de Religión (SNADIR) ha anunciado que también recurrirá el fallo.
Sin embargo, la decisión parece contar con el apoyo de la mayoría de los italianos -el 59% está a favor de sacar la asignatura de la nota final, según el único sondeo realizado hasta el momento, el de Sky Tg 24-. Entre las reacciones a favor, destacan la de Antonio di Pietro, líder de Italia de los Valores, "como católico y con todo el respeto que le tengo a la Iglesia (...) una discriminación confesional no puede tener cabida en la formación escolar".
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