La nicotina, una droga legal

La mayoría de las drogas, bajo determinadas prescripciones médicas son legales, incluyendo la marihuana, la heroína o la anfetamina entre otras. La ilegalidad de éstas consiste en el sobreconsumo y venta en el mercado negro. Sin embargo, la nicotina, la droga que se encuentra en el tabaco, es legal bajo cualquier circunstancia, porque se ha comprobado que no afecta el comportamiento social del fumador, como pudiera ocurrir por ejemplo, con el alcohol. Por tanto, es aceptada socialmente. Incluso, grandes personalidades, figuras públicas y hasta doctores, han sido o son fumadores sin experimentar un rechazo social.


Fumar es una de las costumbres más antiguas del hombre, y una de las más nocivas. El consumo de tabaco es la primera causa de muerte prematura en el mundo. En Estados Unidos mueren, a causa de enfermedades producidas por el tabaquismo, más de 300 000 personas, número superior a los de las muertes ocasionadas por la heroína o la cocaína. “La cantidad de víctimas del tabaco supera a los fallecidos por accidentes viales, tuberculosis, suicidios y HIV", subrayó el neumólogo argentino Miguel Sirna.

Según informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que al concluir este año 2010 la cifra de muertes a causa de enfermedades ocasionadas por el tabaquismo alcance los 6 millones. Además, más de 600.000 fumadores pasivos fallecen cada año en el mundo. En el humo del tabaco se encuentran una gran cantidad de compuestos nocivos, los cuales son causantes de muchas enfermedades que pueden conllevar a la muerte. El consumo de cigarros puede ocasionar en el fumador padecimientos como mal aliento, úlceras, caries, cáncer bucal, hipertensión, pero otro gran problema consiste en la gran cantidad de dinero malgastado para comprar cigarrillos durante toda su vida.

La industria del tabaco gana al año más de 270 millones de dólares a expensas de los fumadores a nivel mundial, quienes al fumar, aceptan el juego que no es sino el de sacrificar su propia salud y por ende, la vida. En el mundo existen más de 1 400 millones de fumadores, una cifra preocupante.

Entre los compuestos tóxicos que están presentes en el humo del tabaco se encuentran el alquitrán, el monóxido de carbono, fenoles, acideínas, y la nicotina, que es precisamente el compuesto que presenta mayor concentración en la hoja del tabaco y es la que ocasiona la fuerte adicción. Esta droga provoca una gran dependencia. Cuando el fumador inhala el humo del cigarro, la nicotina penetra a los pulmones, luego pasa a la sangre, y tarda sólo unos segundos para llegar al cerebro, lo cual crea una sensación de placer a corto plazo en el fumador, sensación que éste tratara de mantener consumiendo cada vez más cigarrillos. De lo contrario, surgirá un fuerte síndrome de abstinencia causado por la droga. El profesor Emilio Ambrosio Flores, licenciado en Ciencias Biológicas y en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid, ha afirmado: "La nicotina es la droga más adictiva en cuanto a recaídas".

La libertad para adquirir y consumir cigarros es, sin dudas, otra de las causas que influye notablemente en ese descontrolado auge del tabaquismo mundial y en las muertes que ocurren debido a la intoxicación con nicotina, de millones de personas que no se conciencian de una vez de que la mejor alternativa es no fumar jamás o, dado el caso, dejar de hacerlo.

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