El Escobillo, sitio de animales exóticos y plantas medicinales milenarias

Noé Zavaleta

Xalapa, Veracruz.- Escondido entre las faldas del Cofre de Perote, dentro del parque nacional del mismo nombre, se encuentra El Escobillo, Unidad de Manejo Ambiental (UMA) que es un extraño oasis de animales exóticos y plantas medicinales milenarias.

A cinco kilómetros y medio de la cabeza municipal de Perote, entrando por la comunidad Ximonco, por un camino de terracería en donde se atraviesa gran parte de las faldas del Cofre de Perote, pasando el ejido Libertad, se localiza este minizoológico.

Ahí tienen su residencia siete llamas centroamericanas de entre 400 y 300 kilos de peso, "se vinieron del Perú a Peru-te", bromea el administrador de esta UMA José María Herrera Briones, quien explicó que estos animales son considerados sagrados en el Perú, pues tienen funciones de animales de carga, de alimento por su carne y su leche y de abrigo por su espesa lana.

En este exótico lugar hay siete avestruces africanas (se distinguen de otras especies, pues sólo tienen dos dedos), en cautiverio llegan a vivir hasta 60 años, avestruces inquietas y traviesas que gustan jugar con desconocidos y ante el flash de la cámara corren hacia este artefacto que las lamparea.

"Lo que se trata en El Escobillo es que la gente conviva con la naturaleza y se sienta parte de ella, aquí hablamos de ecoturismo", resumió Don Chema.

En este zoológico rural también hay emus, otro tipo de avestruz, cuyo distintivo es que son de la raza australiana y sus huevos los ponen en tonalidades verdes, además su alimentación se simplifica, pues comen cualquier alimento apto para una gallina.

Este criadero de fauna exótica y silvestre, ubicado a 3 mil metros sobre el nivel del mar, data desde hace 20 años, sin embargo, poca gente lo conoce, aquí hay animales protegidos que llegan a valer hasta 30 mil dólares, es el caso del borrego cimarrón (conocido como Muflón).

"Nombreee (sic), matas a uno y te vas al bote un buen rato", bromeó José María Herrera y explicó que este bello semental en vida silvestre necesita vivir en un radio de 100 hectáreas y tener hasta dos y tres hembras para aparearse.

"Vive en zonas áridas, repletas de nopales, cactus y agaves".

En dicha UMA, que también hace las funciones de vivero, se desplazan 5 mil plantas aromáticas y medicinales cada mes, señaló Herrera Briones, de las más demandadas por los visitantes se encuentran los bonsáis, cactus, orquídeas, alcatraces, así como plantas carnívoras y otras rarezas que posee y comercializa en su extenso vivero.

En esta zona montañosa también hay un marrano muy curioso, de raza asiática, se le conoce como "panza de olla", cerdo que, explica uno de los cuidadores, es el animal de moda entre los artistas y la gente pudiente que gusta de mascotas extravagantes.

"Lo que sucede es que este marrano asiático tiene una inteligencia similar a la del perro, estudios científicos aseguran que es capaz de concentrar su atención en un televisor, incluso puede ser amaestrado para que -al igual que los perros- aprenda a hacer del baño en un solo lugar, es más, quienes lo tienen de mascota lo ponen a dormir en el sofá".

El distintivo de esta Unidad de Manejo Ambiental es el lince (gato montés), felino que abunda en la región montañosa del Cofre de Perote, en El Escobillo tienen su hábitat tres linces, gatos enormes que se ponen nerviosos ante la presencia de extraños, pero conforme pasa el tiempo gustan de posar para la cámara fotográfica.

Otros mamíferos que aquí residen son el pecari mexicano, cuyo entorno propicio para vivir son las zonas tropicales, razón por la que El Escobillo ha servido de laboratorio reproductor para este animal, pues algunos machos y hembras han ido a parar a Nanciyaga y a Los Tuxtlas.

También de las especies que residen en las faldas del Cofre de Perote se encuentran el jabalí europeo, cuya carne es considerada exquisita y extravagante, un kilo de jamón en el mercado se llega a cotizar hasta en mil 500 pesos, conocido como jamón de bellota, aseguró José María Herrera.