Orihuela La resonancia magnética estará lista en septiembre

D. P.
Las obras de la estructura de hormigón que debe acoger el equipo de resonancia magnética del Hospital de la Vega Baja (Orihuela) está muy avanzadas, según explicaron fuentes del sindicato SATSE de la junta de personal del centro hospitalario. Las mismas fuentes señalaron que la gerencia del centro público les ha comunicado que este servicio puede estar en marcha después del verano. La resonancia magnética es esencial para la detección del cáncer y otras patologías. Ahora los pacientes del Hospital de Orihuela son derivados a otros centros para realizar estas pruebas. El Hospital Vega Baja asiste a un área con casi 200.000 usuarios de Orihuela, Almoradí, Callosa de Segura o Albatera, entre otros municipios del interior de la comarca. El conseller Manuel Cervera, en su última visita al centro hospitalario, anunció para septiembre de 2009 la apertura de la resonancia.

La puesta en marcha de este equipo es una vieja reivindicación de la Plataforma Vega Baja Salud, que vela por el mantenimiento en Orihuela de un hospital público y de calidad y por la mejora de sus recursos humanos y materiales. Unas nuevas infraestructuras que llegan con "cuentagotas" tras la apertura del Hospital de Torrevieja, que permitió descargar al departamento de Orihuela de la mitad de su presión asistencial en 2006.
Para los representantes del sindicato SATSE se trata de una buena noticia que se suma a la consecución de distintas reivindicaciones desde que la Plataforma Vega Baja Salud sacara a la calle a casi diez mil vecinos en marzo de 2009 y presentara 25.000 firmas a la Conselleria de Sanidad y el Ayuntamiento de Orihuela para que se "pusieran las pilas" y que la administración no abandonara al centro, donde trabajan unas mil personas, tras apostar por la promoción de hospitales con gestión privada como el de Torrevieja o el que se pone en marcha esta semana en Elche.
La movilización vecinal permitió que en unos meses la Vega Baja contara con un hospital de día de Oncología o con anestesia epidural las 24 horas para las parturientas, aunque el cierre de las listas de espera o la falta de facultativos en algunas especialidades siguen presentes.