Conjugar la conservación y el aprovechamiento de los montes es posible

Para Espinosa, la clave está en convertir los excedentes de la naturaleza en renta local. Hoy en Segovia también se ha presentado el Libro Verde los principales problemas y las herramientas disponibles para garantizar su protección de los bosques.

Madrid.
Silvia González Cerredelo

La gestión de los recursos naturales del monte debe hacer compatible su aprovechamiento y su conservación. Así lo ha dicho esta mañana la ministra de Medio Ambiente, Elena Espinosa, durante la inauguración de la Conferencia sobre Protección de Bosques que se celebra hoy y mañana en Valsaín, Segovia.

Ha indicado que la conservación de los montes necesita que se encuentren las fórmulas idóneas de promoción de aquellos aprovechamientos multifuncionales que sirven a la vez para el mantenimiento de los procesos agroecológicos y para la generación de rentas agrarias, ganaderas y forestales.

Para Espinosa "la conservación de la naturaleza, cuando se hace de forma inteligente, no es incompatible con el aprovechamiento económico".

En este sentido, ha explicado que conservar un monte no significa parar, detener o prohibir, sino "convertir los excedentes de la naturaleza en renta local" preservando con ello los capitales naturales para que sigan produciendo renta, paisaje y biodiversidad.

LIBRO VERDE

Para abrir el debate sobre cómo garantizar las funciones forestales ante el impacto del cambio climático surge el Libro Verde sobre protección de Bosques e Información Forestal en la Unión Europea.

Se ha presentado hoy durante la Conferencia y expone la situación de los bosques europeos y su relevancia global, señalando sus principales problemas y las herramientas disponibles para garantizar su protección.

Recoge también que es posible aumentar aún más la explotación sostenible de la madera en Europa aunque advierte que esto exigirá un mayor esfuerzo en materia de información para encontrar el equilibrio entre la competitividad de las industrias dependientes de los bosques, la viabilidad económica, el medio ambiente, la fragmentación de la propiedad y la motivación de los propietarios de los bosques.