No es el primer caso de canibalismo galáctico, pero la posibilidad de seguir este acontecimiento está entusiasmando a los astrónomos. La constatación de que un planeta gigante está siendo devorado por una estrella significa que los científicos tienen una oportunidad única de observar cómo un planeta, WASP-12b, entra en esta etapa final de su vida. “Ésta es la primera vez que los astrónomos son testigos de la alteración y muerte de un planeta”, subraya el profesor Douglas N.C. Lin de la Universidad de California en Santa Cruz. Lin es coautor del nuevo estudio y director fundador del Instituto Kavli de Astronomía y Astrofísica (KIAA) en la Universidad de Pekín
WASP 12-b, descubierto en 2008, orbita alrededor de una estrella de masa similar a la de nuestro Sol. Como la mayoría de los planetas extrasolares conocidos, es grande y gaseoso, asemejándose a Júpiter y Saturno en ese rasgo. Pero a diferencia de ellos, orbita extremadamente cerca de su estrella madre, a tan sólo algo más de millón y medio de kilómetros de ésta, o sea unas 75 veces más cerca que la distancia entre la Tierra y el Sol. También es más grande de lo que predicen los modelos astrofísicos. Se estima que su masa es casi un 50 por ciento mayor que la de Júpiter, pero su tamaño es un 80 por ciento mayor que el de Júpiter, lo que le da seis veces el volumen de éste. También es muy caliente, con una temperatura diurna de más de 2.500 grados centígrados.
En la Tierra, las fuerzas de marea entre nuestro planeta y la Luna causan que el nivel del mar suba y baje, modestamente, dos veces al día. WASP-12b, sin embargo, está tan cerca de su estrella que las fuerzas gravitatorias que actúan sobre él son enormes. Las tremendas fuerzas de marea que operan sobre el planeta cambian de manera drástica la forma de este mundo, haciéndolo más similar a un balón de rugby que a una esfera.
Estas mareas no sólo distorsionan la forma de WASP 12-b. La continua deformación del planeta también crea fricción en su interior. La fricción produce calor, lo que hace que el planeta se expanda.
WASP-12b está cediendo su masa a la estrella a la tremenda velocidad de seis mil millones de toneladas cada segundo. A este ritmo, el planeta estará completamente destruido por su estrella en unos diez millones de años. Esto puede parecer mucho tiempo, pero para la astronomía es un periodo minúsculo. Este planeta vivirá 500 veces menos que la edad actual de la Tierra.
Una hipótesis sobre Neptuno
Neptuno puede haber devorado una súper-Tierra que alguna vez habitó el Sistema Solar exterior y de paso apropiarse de su luna. El brutal hecho podría explicar el calor irradiado por el misterioso planeta de hielo y la extraña órbita de su luna Tritón.
La propia existencia de Neptuno fue un enigma hasta hace poco. La nube de polvo que dio origen a los planetas era probablemente más reducia a medida que aumentaba la distancia desde el Sol. Con material de construcción tan escaso, es difícil entender cómo Urano y Neptuno, los dos planetas más lejanos, consiguieron ser tan grandes.
Pero, ¿y si se formaron más cerca? En 2005, un equipo de científicos propuso que los planetas gigantes cambiaron sus posiciones durante una temprana agitación. En este escenario, Urano y Neptuno se formaron mucho más cerca del Sol y emigraron hacia el exterior, posiblemente cambiando lugares en el proceso.
Esto habría dejado bastante material más allá de su lugar de nacimiento para formar un planeta con dos veces la masa de la Tierra, según cálculos publicados en 2008 por Steven Desch de la Universidad Estatal de Arizona en Tempe.
La peculiar luna de Neptuno, Triton, puede haber estado emparejada con esta súper-Tierra hipotética, dicen Desch y su colega Simon Porter. Triton es más grande que Plutón y se mueve por su órbita en la dirección opuesta a la rotación de Neptuno, sugiriendo que no se formó allí, pero que tal vez fue capturado.
Para que Neptuno capturara a Triton, la luna habría tenido que reducir su velocidad drásticamente. Una forma de lograrlo es que Triton hubiese tenido un compañero que se llevó la mayor parte de la energía cinética del par después del encuentro con Neptuno. En 2006 los investigadores argumentaron que Triton al principio estaba apareado con otro objeto de tamaño similar que terminó por ser lanzado gravitacionalmente al espacio después de que el par se acercara a Neptuno.
Pero Triton podría haber ido más despacio aún si su antiguo compañero fuera una súper-Tierra pesada. Es porque un cuerpo más masivo podría llevarse una mayor cantidad de la energía cinética del par, calculó Desch en un estudio presentado a principios de este mes en la Conferencia de Ciencia Lunar y Planetaria en Houston, Texas. “Sería mucho más fácil capturar Triton si orbitara a algo más grande”, dice él.
Neptuno puede haber ‘engullido’ a la súper-Tierra. El calor dejado por el impacto podría explicar por qué el planeta irradia mucho más calor que su primo Urano, siendo similares en cuanto a su masa y composición, dice Desch.
Pero Douglas Hamilton de la Universidad de Maryland, College Park, uno de los autores del estudio de 2006 que propone que Triton tuvo un gemelo perdido hace mucho, indica que los cuerpos pequeños habrían sido comunes en el Sistema Solar temprano, antes de que la migración planetaria quitara a muchos de ellos. Por lo tanto Neptuno habría tenido muchas oportunidades de obtener a Triton a partir de uno de estos objetos más pequeños, y no de una súper-Tierra mucho más rara, de modo que aún puede ser la explicación más probable, dice. Aun así, él no está dispuesto a excluir la idea de Desch: “Vale la pena seguir para ver donde nos llevará”.
FUENTE: NC&T)
Ultimas noticias:
Un planeta gigante está siendo devorado por una estrella
Etiquetas: Astronomia | author: BuscadorPosts Relacionados:
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario
Las opiniones escritas por los lectores de este blog serán de su entera responsabilidad. No se admitiran insultos ni ofensas, ni publicidad o enlaces a otros blogs, de lo contrario se podrán eliminar sin previo aviso.