La maldición de Tutankamon

Aunque Tutankamon no fue uno de los más importantes reyes en la historia egipcia, la tradición de su maldición ha trascendido de tal manera que lo ha convertido en el más popular de los monarcas luego de muerto.

Se sabe que en 1333 a.C. el rey Tut asumió el poder siendo todavía un niño, pero que en realidad su gobierno siempre estuvo dirigido por su asesor Ay y su general Horemheb, hasta que el rey cumplió la mayoría de edad.

Misteriosamente el rey Tut muere y lo sucede en el cargo su asesor Ay, quien al igual que su predecesor fallece también en circunstancias bastante misteriosas. Es así que el general del rey Horemheb se convierte finalmente en el nuevo gobernante de ese reino.

Durante casi 3000 años, la tumba del rey Tutankamon estuvo cerrada, hasta que en 1922, el arqueólogo Howard Carter se encontró frente a las puertas luego de meses de búsqueda en el desierto.

Lo que encontró fue verdaderamente maravilloso, pues en el interior había grandes tesoros arqueológicos así como muchas joyas y objetos de oro. Pero el más grande tesoro fue indudablemente hallar la cámara mortuoria, y en ella, la tumba intacta de Tutankamon.

Era una costumbre de los egipcios proteger las tumbas de los saqueos y profanaciones colocando advertencias en ellas o hasta maldiciones que evitarían que el descanso de sus muertos se viera interrumpido. Sin embargo, según refirió Carter, en ella nunca encontró algo parecido.

wood-box2

La maldición llegó al poco tiempo, pues el mejor amigo de Carter que estuvo junto a él en el descubrimiento moría de una neumonía, aunque algunos refieren que fue una septicemia producto de una herida.

Pero eso no fue todo, pues ese mismo día las luces de todo El Cairo se apagaron sin razón alguna, mientras que en Inglaterra también caía muerto el fiel perro del mejor amigo de Carter.

Pero antes ya habían surgido algunos malos presagios en todo esto, pues mientras buscaban la tumba, el arqueólogo Carter llevaba consigo un canario como amuleto, según él para que le trajera suerte en la búsqueda. El día que hallaron las escaleras que desembocaban en la tumba Carter refirió que la pequeña ave le había traído suerte, sin embargo, el mismo día que abrieron la cámara mortuoria, una cobra – que todos saben que era el animal sagrado de los faraones- mató al canario.

stone-coffin1

A la muerte del mejor amigo de Carter le sucede la muerte de su hermano que era operado de un caso menor. Luego fallece el ayudante personal de Carter de pleuresía y después otro egiptólogo que estuvo el día que abrieron la tumba.

Alrededor de veinte personas más murieron luego de esto, y todas ellas en circunstancias extrañas de comprender. Entonces… ¿existió la maldición realmente?

Fuente: Sobre Leyendas