El cliente ya comienza a elegir entre la Semana Santa y el verano

La Semana Santa siempre se toma como el indicador turítico que avanza el comportamiento que va a tener la temporada de verano, pero ya comienza a haber indicios de que la situación económica ha llevado a los clientes a optar por una de las dos temparas. Así lo están comenzado a percibir los empresarios del sector, que aeguran que ya hay clientes que han realizado reservas para el mes de agosto (algo inusual, cuando la tendencia apunta a que las reservas se realizan a última hora) y "posiblemente sean de quienes dejarán de venir en Semana Santa".

Es pronto aún para poder aventurarse a definir o al menos esbozar el comportamiento que el cliente va a tener en los próximos meses, más aún cuando el buen tiempo es el que determina en la provincia el nivel de ocupación. Lo que sí está claro es que el segmento del golf está comportándose positivamente: en febrero, los datos de visitantes extranjeros (base de las visitas en esta época, en la que este deporte es el principal motor) dejan un incremento del 17% respecto al año pasado. Un incremento que no ha servido para aumentar, o al menos mantener el nivel de turistas que llegaron hasta nuestra provincia el mismo mes del pasado año, ya que el que se ha resentido es el visitante nacional (que representa el 83% del total), que ha caído un 5%