La crisis dispara el número de matrimonios civiles en Jaén, la mitad de caros que los religiosos

Comienza la temporada alta de las bodas en la provincia. En los próximos seis meses se celebrarán el 75 por ciento de los enlaces de todo el año. Pero el hecho de que en un semestre, coincidiendo con el buen tiempo, se concentren tres de cada cuatro eventos nupciales no quiere decir, en absoluto, que los desposorios vayan a más.

Al contrario, las cifras de casamientos fluctúan en estos momentos en niveles históricamente bajos, inferiores incluso a la barrera psicológica de los 3.000 anuales. Aunque este asunto, nada baladí si tenemos en cuenta que genera un movimiento económico de unos 72 millones de euros en Jaén, no debe valorarse tan sólo en magnitudes cuantitativas, sino también cualitativas.


Hay menos 'sí quieros', pero también ganan enteros las ceremonias civiles. Jamás se habían contabilizado tantas en Jaén, una de cuatro para ser más exactos. Así lo revela el último informe sobre Movimiento Natural de Población del Instituto de Estadística, donde se recoge que, en efecto, el 25 por ciento de los esponsales se firman en los juzgados o en los ayuntamientos. El dato corresponde a 2008, pero sirva de referencia que este porcentaje era del 22,2 por ciento en 2007 y del 19,5 por ciento en 2006.


¿Qué está pasando? Detrás de este 25 por ciento hay dos razones. Una estructural y otra coyuntural. Estructural porque nos situamos en el punto más alto de una gráfica que muestra una tendencia ascendente a lo largo de la última década. Y coyuntural por esta fortísima crisis en la que todavía nos encontramos inmersos, que obliga a los contrayentes a dejarse de dispendios y optar por fórmulas que permitan una mayor racionalización del gasto. Y es que mientras un casorio por el rito católico, con unos 100 invitados, puede salir en Jaén por unos 20.000 euros, otra concelebrada por el juez o el concejal de turno, con la mitad de asistentes, cuesta menos de 10.000 euros. Se trata, en cualquier caso, de números aproximados, ya que la factura final será mayor o menor en función de múltiples variables, pero fundamentalmente de una: cuantos convidados acudan al copetín.

Un 17% menos

La recesión está haciendo un daño enorme a este sector. A falta de que se divulguen las estadísticas oficiales del pasado 2009, las empresas especializadas en este negocio estiman que se ha producido una reducción del 17 por ciento en la cantidad de coyundas respecto a 2008. La principal causa de este descenso es que el hundimiento de la economía está afectando sobre todo a los jóvenes, el colectivo en edad de contraer. Los varones jienenses matrimonian normalmente a los 28 años, mientras que las mujeres lo hacen a los 27 -la franja más habitual va de los 27 a los 31 años-.

Este grupo de población está sufriendo en primera persona el aumento desmesurado de las tasas de desempleo, que superan el 25 por ciento en Jaén según los resultados de la Encuesta de Población Activa (EPA) concernientes al cuarto trimestre de 2009.

Pero lo más preocupante es que las expectativas para 2010 no son mucho más positivas, habida cuenta de la necesidad de que Jaén crezca por encima del 2 por ciento para crear empleo neto, algo bastante improbable a juicio de los agentes sociales. Huelga decir que la situación de paro limita cualquier inversión de envergadura que se quiera acometer y condiciona, igualmente, proyectos biográficos que requieren de un mínimo de estabilidad financiera.


Relacionado con esto último, surge de forma inmediata el problema de acceso a la vivienda. El mercado de la compra-venta sigue vetado para rentas medias y bajas. Tan sólo la construcción de pisos de VPO, como los más de mil que se erigen en estos momentos en la Zona de Expansión Norte, puede dar respuesta a esta carencia.

A pesar de ello, la oferta sigue siendo bastante menor que la demanda. Un buen ejemplo de ello es el volumen de solicitudes que está registrando la Junta de Andalucía para estas promociones a precio tasado del Bulevar. La Delegación de Vivienda estima que para el 23 de marzo, fecha límite para formalizar todo el papeleo, se computarán en torno a 4.000 peticiones, lo que dejaría 'fuera de juego' a tres de cada cuatro interesados. A todas estas dificultades habría que agregar otra no menos importante, el cerrojazo de la banca a la hora de conceder nuevas hipotecas. Las incertidumbres y el peligro de perder el trabajo ha generalizado los perfiles de riesgo. Además, los préstamos no superan en ningún caso el 80 por ciento del valor de la operación, lo que obliga a los compradores a poner de su propio bolsillo el 20 por ciento restante, un 'handicap' de primer orden que excluye a muchas personas.


Alquileres prohibitivos


La alternativa del alquiler tampoco termina de cuajar. Resulta muy difícil hallar algo en Jaén por menos de 400 euros. No hay más que echar un vistazo a internet para comprobarlo. Además, las rentas se han encarecido un 2,3 por ciento en el último año, lo que supone prácticamente el triple que la inflación general en este período de tiempo, que se situaba en febrero en el 0,9 por ciento. Los 210 euros de la Renta Básica de Emancipación han sido una ayuda para muchos de los que querían independizarse -se han autorizado 2.500 subvenciones-, pero también es igual de cierto que los arriendos no han parado de encarecerse, anulando en gran medida el efecto benéfico de los 210 euros y de otros tipos de incentivos de origen autonómico.


JORGE PASTOR | JAÉN.