Tecnología de guerra para personas sin movilidad

Una pequeña cámara conectada a un ordenador registra los movimientos de los ojos de la persona que está mirando la pantalla y el sistema interpreta esa información como si se tratara de las evoluciones de un ratón sobre la mesa. Un guiño o la mirada fija en un punto concreto durante un rato equivalen a un 'clic'. Parece pan comido, pero requiere esfuerzo y entrenamiento. «Se trata de músculos que dirigen el globo ocular y hay que ejercitarlos todos los días», señala Pedro Palomo, el físico que tuvo la idea de utilizar en el campo de la discapacidad esta tecnología desarrollada por el ejército de Estados Unidos.
En su versión bélica servía para facilitar a los pilotos dirigir su avión y disparar a un tiempo. Desde 2003, cuando Palomo concluyó su trabajo de adaptación, ofrece la posibilidad de utilizar un terminal informático a personas con grandes limitaciones motoras. «Está destinada a quienes se mueven con demasiada dificultad para usar un aparato normal y no hablan con la suficiente claridad como para servirse de un reconocedor de voz». En la actualidad, esta innovación informática ayuda a enfermos de Esclerosis Lateral Amiotrófica y afectados de parálisis cerebral, ictus y tetraplejias, entre otras patologías. En Valladolid ha hecho posible la escolarización normal de una niña de cinco años que, sin esta herramienta, no hubiera podido integrarse en un centro ordinario; en Galicia, una joven que se había visto obligada a abandonar sus estudios de ESO ha podido retomarlos. Son algunos ejemplos de los beneficios que puede aportar.